Después de una semana ingresados en el hospital es un auténtico placer poder decir que ya estamos en casa.
El susto no te lo quita nadie, pero gracias a Dios todo ha salido muy bien.
Desde aquí agradecer a todo el personal del Hospital Reina Sofía de Murcia el trato recibido desde el primer momento que entramos allí. Muchísimas gracias a los médicos que atendieron a mi hijo, a todas las enfermeras, auxiliares de enfermería, a la profesora de hospital que nos vino a visitar por si necesitábamos algo, a una auxiliar (cuyo nombre ahora no recuerdo) y que nos trajo a dos guitarristas muy simpáticos para amenizar un poco la estancia, a las limpiadoras de planta por su simpatía, incluso a las chicas que repartían las bandejas de la comida. Muchas gracias por vuestro trabajo diario, por vuestra dedicación, profesionalidad, buen humor y cariño, porque mi hijo era el Rey del pasillo.
Muy orgullosos de nuestra Sanidad Pública!!!!!!!!